Andrea Righi de Oliveira Kelian

Enfermera especialista en Gerenciamiento de Enfermería, Administración Hospitalaria y en Gestión de la Calidad en Salud

16/05/2014

Resumen

Dentro de los eventos adversos (EA) discutidos, uno de los que traen más preocupación son los relacionados a los errores de medicación y más específicamente, los relacionados a la administración de medicamentos. Este estudio tiene como objetivo levantar los datos científicos para proponer un modelo de cálculo de costo de los EA en el Brasil. Fue realizada un estudio bibliográfico de artículos publicados entre 1995 y 2014, nacionales e internacionales. Con base en los artículos podemos proponer un modelo de costo estimado, mínimo, con EA relacionados a errores de administración. Entendemos la importancia de invertir en acciones que puedan mitigar el riesgo de ocurrencia de esos EA, en lugar de tener un costo elevado para las soluciones de las mismas.

INTRODUCCIÓN

Actualmente el asunto del error de medicación está trayendo gravísimos trastornos y manifestando preocupaciones en cuanto a la responsabilidad de disponibilidad de un ambiente seguro con calidad en la asistencia de enfermería.

La administración de medicamentos es una de las actividades más serias y de mayor responsabilidad de la enfermería y para su ejecución es necesaria la aplicación de varios principios científicos que fundamentan la acción del enfermero/a, de forma de proveer la seguridad del paciente.

Medicar paciente depende de acciones meramente humanas y los errores hacen parte de esa naturaleza, sin embargo, un sistema de medicación bien estructurado deberá promover condiciones que auxilien en la minimización y prevención de los errores, implementando normas, reglas, acciones, procesos con finalidad de auxiliar a los profesionales involucrados.

Los eventos adversos relacionados con medicamentos pueden llevar a importantes agravamientos en la salud de los pacientes, con relevantes repercusiones económicas y sociales.

La utilización de medicamentos es una de las intervenciones más utilizadas en el ambiente de hospital, mientras, estudios, a lo largo de los últimos años, han evidenciado la presencia de errores en el tratamiento de medicamentos causando perjuicios a los pacientes, que van desde el no-recibimiento del medicamento necesario, hasta lesiones y muertes (LEAPE et al. 1995; TAXIS & BARBER, 2003). La administración de medicamentos corresponde a la última oportunidad de evitar un error en la medicación, que puede haber surgido desde la prescripción o en la dispensación de los medicamentos.

Los profesionales de la salud deben estar conscientes y alertas para este tema y buscar permanentemente, medidas de prevención de errores a través de nuevos conocimientos, conductas o estrategias que apunten a proteger todos los involucrados, en especial al paciente.

Obtener una visión amplia del sistema de medicación posibilita a los profesionales las condiciones de análisis e intervenciones que garantizan una asistencia responsable y segura a los pacientes y sí mismos.

Los errores en la medicación son considerados eventos adversos al medicamento, pasibles de prevención, pudiendo o no causar un serio daño al paciente, con posibilidad de ocurrir en uno o en varios momentos, dentro del proceso de medicación (BATES et al, 1995; LEAPE et al. 1995).

El Institute of Medicine de los EUA publicó en 1999 un libro documento titulado “Errar es Humano: Construyendo un sistema de salud más seguro” (To Err is Human: Building a Safer Health System).

Esa mortalidad atribuida a los eventos adversos, en la asistencia de la salud, era una mortalidad (en EUA en la época de la publicación) mayor que la de accidentes automovilísticos (43.458 muertes en un año), de cáncer de mama, (42.297 muertes en un año) o AIDS (16.516 muertes en un año), colocando a las muertes por errores de la asistencia de la salud, como la octava causa de muerte en los EUA.

Esa publicación trajo también datos de la estimativa de costos generados por los eventos adversos a lo largo de un año en los EUA: U$S 17 a 29 mil millones por año.

Esa publicación causó un gran impacto en la opinión pública de los EUA. El entonces presidente Bill Clinton convocó a las agencias de salud federales a aplicar las recomendaciones del Institute of Medicine.

En marzo de 2014, el Ministerio de Salud, la Fundación Osvaldo Cruz y la agencia ANVISA lanzaron: “Documento de referencia para el Programa Nacional de Seguridad del Paciente”, donde también menciona que 10% de los pacientes sufren un evento adverso y de estos un 50% sería evitable. Este dato se refiere a estudios realizados en Australia, Inglaterra, Nueva Zelandia, Canadá entre otros países, inclusive Brasil (DE VRIES, 2008).

La Seguridad del Paciente se refiere a la reducción de riesgos de daños desnecesarios asociados a la asistencia de la salud (eventos adversos) hasta un mínimo aceptable, La incidencia de pacientes que sufren alguna especie de evento adverso cuando son hospitalizados puede llegar a 17% dependiendo del estudio realizado.

Estos eventos adversos incluyen: aumento del tiempo de hospitalización, lesiones temporarias o permanentes y hasta inclusive la muerte. Es fundamental que se piense en la importancia del gerenciamiento de los riesgos, volcados para la seguridad del paciente.

En el documento “To Err is Human: Building a Safer Health System” del Institute of Medicine (EUA) publicado en 1999, basado en los estudios realizados en Colorado, Utah y Nueva York e, apunta que 33,6 millones de internaciones realizadas en el año 1997, en hospitales de los EUA, entre 44.000 y 98.000 americanos murieron debido a problemas causados por errores en la atención. (KOHN et al., 2001).

De esta forma y basados en la literatura estudiada sobre este asunto, tenemos como objetivo proponer un modelo de costo, estimado mínimo con los EA relacionados con los errores de administración.

DESARROLLO

Los resultados de un estudio realizado en dos hospitales terciarios de gran porte, Brighan and Women’s Hospital y Massachusetts General Hospital, en los EUA apuntó una media de 6,5 eventos adversos al medicamento cada 100 internaciones, de las cuales 28% podrían haber sido evitadas (BATES et al., 1995).

Los errores de medicación pueden, muchas veces, causar daño al paciente y según Bates (1996), cerca de 30% de los daños durante la hospitalización están asociados a errores en la medicación, los cuales traen también serias consecuencias económicas a las instituciones de salud. Se estima un gasto de aproximadamente U$S 4.700 por evento adverso de medicamentos evitable y unos U$S 2,8 millones anualmente en un hospital escuela con 700 camas. El costo anual de mortalidad referente a los errores en la medicación, en los EUA, ha sido estimado en torno de U$S 76,6 mil millones (BERWICK & LEAPE, 1999; KOHN, et al., 2001; ANDERSON, 2002).

Medicar pacientes requiere de un proceso de comunicación eficaz para que esta actividad sea realizada con éxito. Problemas en la comunicación pueden ser una de las causas de errores en la medicación y se originan en varias situaciones encontradas en el día a día del profesional (BARKER & HELLER, 1964 apud, RIBEIIRO, 1991, p 70).

Se sabe que los errores hacen parte de la naturaleza humana, por lo tanto, los sistemas de medicación deben ser bien estructurados con la finalidad de promover las condiciones que auxilien en la disminución y prevención de los errores, planificando los procesos e implementando normas, reglas y acciones.

El sistema de medicación de un hospital es abierto y complejo, involucrando varias etapas que están inter-relacionadas e inter-conectadas por varias acciones, desenvolviendo de 20 a 30 pasos diferentes durante los procesos de prescripción, dispensación y administración de medicamentos, incluyendo siempre muchas personas y múltiples transferencias de pedidos de drogas o materiales, que pasan de una mano a la otra y que pueden conducir a errores en la medicación (LEAPE, et al., 2000).

En 1989 la Joint Commission on Acreditation of Healthcare Organizations – JCAHO identificó cinco componentes o procesos del Sistema de medicación, que serían: selección y obtención del medicamento; prescripción; preparación y dispensación; administración de medicamentos y acompañamiento del paciente en relación con los efectos del medicamento (NADZAM, 1998).

De acuerdo con un estudio del INCA (Instituto Nacional del Cáncer) de noviembre de 2010, los errores más comunes en la administración de medicamentos son la técnica inadecuada, la vía errada, preparación inadecuada, y administración sin tener en cuenta los cuidados relativos a ese medicamento. Los errores pueden resultar en serios problemas al paciente y a su familia, como generar incapacidades, prolongar el tiempo de internación y recuperación, exposición a más procedimientos y medidas, atraso o imposibilidad de reasumir sus funciones sociales y hasta la muerte.

La administración de medicamentos puede ser considerada, en una institución de salud, como la actividad con más elevado riesgo, pues, son inherentes a la práctica diaria del cuidado del paciente y por estar esta actividad íntimamente ligada y dependiente de la acción humana.

Hoy en día, cerca del 88% de los pacientes que procuran atención de la salud reciben prescripción de medicamentos (CASSIANI, 2005).

En un estudio realizado en varios países, incluso en Brasil, fueran observados en 24 horas, 1328 pacientes dentro de las UTI’s, en relación con la administración de medicamentos y encontraron que los errores más comunes son:

  • Dosis errada
  • Droga errada
  • Vía errada
  • Tiempo o momento de administración errado
  • Ausencia de administración (omisión).

En el total de 1328 pacientes observados fueron encontrados, en 24 horas, 861 errores en 441 pacientes, o sea, algunos pacientes sufrieron más de un error en las 24 horas. En 12 de ellos, hubo daño permanente o muerte.

En este análisis, podemos verificar que del total de pacientes observados el 33% sufrió algún error en relación con la administración de medicamentos.

Un estudio de la USP (Universidad de São Paulo), realizado en 2010, analizó 5 hospitales universitarios y evidenció que hubo 30% de errores en la administración de medicamentos, de esa cantidad el 77,3% de horario errado, 14,4 % de dosis erradas, 6,1% vía errada, 1,7% de administración de medicamento no autorizado y 0,5% en paciente errado. En este estudio se analizaron 4958 administraciones de dosis vía endovenosa y 1.500 errores (30%).

Dentro de los estudios citados, el número de eventos adversos que sería evitable llega a ser próximo al 60% de las situaciones descriptas.

Si tenemos en cuenta las muertes y las lesiones graves, que pueden suceder, podría haberse evitado mucho sufrimiento al paciente y a sus familias.

Basándonos en los artículos levantados podemos diseñar un esquema para mayor entendimiento de los datos encontrados:

ESQUEMA DIDÁCTICO DE LA ESTRUCTURA DE LOS EVENTOS ADVERSOS, RELACIONADOS A ERRORES DE ADMINISTRACIÓN.

Esquema didáctico de la estructura de los Eventos Adversos, relacionados a Errores de Administración

En los estudios levantados fueron pocos los artículos encontrados relacionados con el costo de la no-calidad, más específicamente hablando sobre los costos de un evento adverso relacionado con los errores de medicación.

La mayor parte de los estudios que relatan los valores gastados con eventos adversos, traen un costo calculado en forma general, o sea, provenientes de cualquier tipo de evento adverso.

En las décadas del 50 y 60 ya existían registros de ocurrencia de eventos adversos (EA) en los servicios de salud, pero fue en la década del 90 que los estudios mostraron la importancia de los costos sociales y económicos relativos a esos EA. El Harvard Medical Practice Study (HMPS) estimó que sucedieron 3,7 % de EA en las internaciones en hospitales de cuidados de agudos en el estado de NY, EUA, en 1984 (PORTO, 2010).

La metodología utilizada por el HMPS sirvió de base para otros estudios realizados en diferentes países.

El estudio realizado por THOMAS et al., en 3 hospitales de los estados de Utah y Colorado EUA, mostró que en 3% de las internaciones acontecieron EAs, siendo un 33% evitables en Utah y 27% en Colorado. Estimaron que, con la eliminación de los EA evitables, se podría economizar entre 17 y 29 mil millones de dólares, incluyendo las perdidas por inactividad, incapacidad y gastos médicos.

Un estudio realizado en el Reino Unido evaluó que ocurrieron EAs en 10,8 % de los pacientes internados, siendo un 48% evitables. Los pacientes con EA tuvieron un promedio de permanencia mayor en 8,5 días (variación entre 0 y 70 días) cuando comparado con el promedio de los pacientes sin EA. Los autores estiman un costo de cerda de 2 mil millones de libras esterlinas por año, asociado exclusivamente al aumento de los días de internación que sufrieron los pacientes con EA.

Un estudio australiano observó la ocurrencia de EA en 7% de las internaciones con un aumento promedio de 10 días en los tiempos de las mismas. Los costos de los EA correspondieron a 16% de los costos directos del hospital, lo que representa un 19% de aumento en el presupuesto de las internaciones.

Hay razones para supones que los costos con eventos adversos en Brasil estén subestimados, porque las informaciones financieras no incluyen los gastos con los salarios de los funcionarios del hospital, por ser públicos, aunque sean computados los gastos con personal de servicios tercerizados. El segundo aspecto es relativo a la utilización en el análisis financiero, del valor medio pago por día de internación. Los estudios mostraron que los días de internación, después de la ocurrencia de un EA, son más caros que los anteriores. Como esa discriminación no puede ser realizada, en este estudio, se supone que el valor promedio observado, sea menor que el valor promedio real (PORTO, 2010).

Después del análisis de los estudios realizados, se proponen tres casos con valores similares para el costo de un evento adverso.

Siguen abajo los ejemplos:

Como escenario para los ejemplos proponemos un hospital de 200 camas, donde tenemos 5.400 pacientes-día, podemos inferir 65.000 dosis de medicamentos son administradas mensualmente. Usaremos esos datos para los cálculos de costos con EA evitables.

No están incluidos en estos cálculos los eventos centinela, muertes y costos judiciales.

Los valores presentados representan un costo estimado mínimo.

1. Aplicando el esquema didáctico de la estructura de Eventos Adversos relacionados a los errores de Medicación, tenemos:

Calculando el costo de recuperación de 3 dias en la UTI a un costo de R$ 3.200 por día, según datos de ANVISA (R$ = Real Brasilero)

Costo de 12 EA x 3 días x 3.200 R$ = R$ 116.640 por mes.

Nota: a los costos de hoy, enero de 2017, cuando se realiza esta traducción el valor del dólar está a 3,2 R$ por dólar, o sea el valor final es de 12 x 3 x 1.000 = 36.000 U$S por mes.

2. De acuerdo con un estudio de la FIOCRUZ de RIO, publicado en 2010, en la revista Portuguesa de Salud Pública, por Mendes y Colaboradores, trajeron datos similares al caso anterior, que, aplicados a un escenario de 200 camas, tendríamos los siguientes valores:

  • 200 camas con 90% de ocupación en 30 días, nos dan 5.400 pacientes-dia
  • 10% de ellos nos darán EA
  • 50% de los anteriores son evitables
  • 50% de los de ellos serán graves o moderados
  • 30% pertenecen al proceso de medicación
  • 30% pertenecen al proceso de administración de medicamentos
  • Finalmente tenemos 12 pacientes por mes con EA grave o moderado.

FIOCRUZ - estudio de EA en un hospital de 200 camas

Nuevamente calculamos con los datos de ANVISA = R$ 3.200 por dia

(Nota: Ello nos da 1.000 u$s con la cotización de hoy.)

Costo = 12 x 3 x 1.000 = 36.000 u$s por mes.

3. Según otro estudio publicado en la Revista de la Asociación Brasilera en 2013 por Mendes y colaboradores, presentaron los siguientes datos: en una muestra de 1.103 pacientes fueron identificados 65 EA evitables, de los 56 pacientes que sufrieron EA evitable, o sea, algún paciente puede haber sufrido más de un EA evitable. Estos evitables produjeron 373 días de internación de aumento. Por lo tanto, sigue abajo la proyección de los costos evitables, aplicando estos datos a un hospital de 200 camas como fue sugerido anteriormente. También incluimos el dato del 30% de EA referente a errores de administración, conforme el ejemplo del estudio anterior.

5.400 pacientes/día x 373 días de recuperación/1.103 paciente x 4,6% corresponden a medicación x 30% corresponden a administración = 25 dias /mes.

25 días / mes x 1.000 u$s /día = 25.000 u$s / mes.

De acuerdo con los casos presentados arriba, podemos concluir que los modelos ofrecen valores similares entre 25.000 y 36.000 dólares por mes para el costo de los EA evitables.

CONCLUSIÓN

Este estudio evidenció primeramente que en varios países hay estudios mostrando la preocupación en mitigar los EA que ocurren en sus instituciones. Vale señalar que en los EUA este asunto está arriba de la mesa de trabajo hace ya varias décadas y por el eso el Monitoramiento de la gestión de riesgo está más maduro en ese país.

Demuestra también la mudanza en la percepción en cuanto a la sacudida que los EA pueden causar. Trae también a la superficie, la necesidad de evaluar con más cuidado las consecuencias, para el paciente, la familia, y la institución de estos EA, como por ejemplo el error en la medicación. Infelizmente el evento adverso, más específicamente el error relacionado con la administración de la medicación, ocurre con una frecuencia mucho mayor que lo que debería, como muestran los estudios nacionales e internacionales a ese respecto, causando muchas veces mayor tiempo de internación.

Otro aspecto por considerar se debe al hecho que el valor financiero utilizado para atender a los EA con daños moderados o graves, y hasta mismo el óbito, podrían ser invertidos en otras áreas, como nuevas tecnologías, edificios, recursos humanos, prensa, entre otros.

Por eso es importante y urgente el estudio sobre este asunto, sus discusiones y principalmente las nuevas propuestas, para mitigar el riesgo de que acontezcan nuevos EA.

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